En 1866, el joven Henry Sherwin, se aventuró a montar un pequeño negocio de reventa de tintas. Era el inicio de una empresa que más tarde se transformaría en una importante industria en el ramo de tintas, y que hoy está presente en varios países.
Con gran visión emprendedora Henry Sherwin confió en el futuro potencial de la empresa, pero su primer socio, Truman Dunhan, no lo acompañó y se retiró del negocio tres años después. Dos nuevos socios entraron en su lugar, pero solamente uno de ellos permaneció en la actividad – Edwar Porter Williams. La nueva colaboración, iniciada en 1870, llevó el nombre comercial de Sherwin-Williams & Co. Tres años después, tiempo en que la competencia se dedicaba al comercio de aceite de linaza, los socios se profundizaron en los estudios sobre el mercado norteamericano de tintas, pues ya pretendían fabricarlas.
La empresa avanzó y, en 1873, instaló su primera unidad de producción. A partir de 1880 dio un gran salto en dirección al desarrollo. En aquel año lanzó en el mercado la tinta SWP – Sherwin-Williams Paint, que se transformó en un gran éxito de ventas. Desde entonces, el negocio siguió creciendo. En el cambio del siglo, la empresa ya era grande y en poco tiempo empezó a dominar el mercado de tintas de Estados Unidos y Canadá, siempre invirtiendo en investigación, desarrollo de nuevos productos.
En 1930 incorporó una de las más antiguas industrias de tintas del mundo, John Lucas & Co, de Filadelfia, y la etapa siguiente fue la expansión de sus actividades industriales para América y desde ahí para el mundo. En el inicio de la década de 40, después de instalarse en Habana y Buenos Aires, la ciudad elegida fue São Paulo.
Sherwin-Williams llegó a Brasil en 1938. En 1944, comenzó su producción local, con la adquisición de Soperba, entonces una industria de tintas instalada en el barrio de Moema. Después de modernizar esa unidad, dio inicio a lo que los investigadores llaman “segunda etapa” de la historia del mercado de tintas – la introducción de la primera tinta PVA (a base de agua), con la marca Kem Tone.
En la década de 70, fue la primera industria del sector a utilizar la técnica de mezcla de tintas en tiendas. En el mismo período, innovó con el lanzamiento de la primera tinta acrílica del mercado brasileño, hasta hoy consagrada marca Metalatex.
En 1982, Sherwin-Williams dio inicio a un gran proyecto de expansión de sus actividades, al inaugurar una fábrica de alta tecnología para los estándares de la época, en el municipio de São Bernardo do Campo (SP), donde permaneció hasta 1997, cuando se transfirió para Taboão da Serra – fábrica ya concebida para recibir la ISO 14 001.
En 1995, Sherwin-Williams Company adquirió la empresa de tintas automotrices Lazzuril, fundada en 1978.
Desde la adquisición Sherwin-Williams División automotriz en Brasil invierte fuertemente en el desarrollo y producción de varios productos innovadores que atienden a las necesidades de todos nuestros clientes.
En 1999, Sherwin-Williams División automotriz conquista el Certificado de Calidad ISO 9001, confirmando así la adecuación de todo su sistema de gestión a las normas de calidad. Este certificado ya está actualizado con la versión 2008.
En 2000, la empresa lanza el sistema Lazzudur Alto Sólidos , compuesto de bases poliéster y poliuretano y todos los complementos de la línea.
En 2004, la empresa introduce el sistema de alta performance dirigido a procesos de alta productividad, la Línea Fast .
Empresa ecológicamente responsable, en enero de 2004, es reconocida con el Certificado de Gestión Ambiental ISO 14001 .
En 2007, recibe el Certificado OHSAS – 18001 versión 2007 – Sistema de Gestión de Seguridad y Salud. La División Lazzuril fue la primera unidad de Sherwin-Williams, con planta fuera de los Estados Unidos, a recibir esta certificación.
Hoy, Sherwin-Williams División automotriz ya actúa en diversos países de Latinoamérica, como Argentina, Chile, Paraguay, Uruguay, Perú, Bolivia y Ecuador, y trabaja desarrollando y perfeccionando sus productos, que ya ultrapasan seis mil ítems, así como sus servicios, para así, mejor atender a sus clientes.